Limpiadores Faciales

Este tipo de limpieza es una rutina de gran importancia para conservar la higiene de la piel del rostro, evitando que se aglomere suciedad, se disminuya la vitalidad, frescura y luminosidad.

¿Qué es una limpieza facial profunda?

La limpieza facial profunda es un procedimiento que favorece la salud y el exterior de la piel del rostro, logrando la eliminación de los puntos negros, comedones e impurezas que se adhieren diariamente originando la disminución de la vitalidad, frescura y luminosidad.

Este tipo de limpieza para el rostro origina excelentes resultados en la piel, favoreciendo su respiración, a la vez que mejora la regeneración de las células conservando un aspecto más saludable.

Reactiva de forma natural la elaboración de nutrientes que componen la estructura de la piel como el colágeno, la elastina y la reticulina. Además, mejora la absorción de cremas y productos hidratantes y nutritivos.

Adicionalmente, colabora con la eliminación del aspecto de rostro cansado, disminuyendo las ojeras y líneas de expresión, a la vez que proporciona una mayor nutrición e hidratación de la piel.

Este tipo de procedimiento tienen un excelente precio limpieza facial, ya que favorecen el restablecimiento de la suavidad y luminosidad del rostro para que se vea más joven y saludable.

¿Conoce los Beneficios de la limpieza facial?

La limpieza del rostro origina excelentes beneficios a la piel, entre los que se pueden nombrar:

• Excluye y remueve las impurezas y células muertas, favoreciendo la renovación de la piel.
• Retarda el envejecimiento y la manifestación de arrugas.
• Origina que la piel se vea más resplandeciente, suave y tersa.
• Previene a aparición del acné y puntos negros.
• Mejora la absorción de productos cosméticos, mejorando su efectividad.
• Favorece la hidratación y mejora la oxigenación de la piel.
• Colabora con la reducción del aspecto de cansancio.
• Acepta y expone mejor el maquillaje.
• Tiene un excelente precio limpieza facial.

¿Cómo se Debe Realizar la Limpieza facial?

Para iniciar una limpieza facial se recomienda excluir el maquillaje y las impurezas del rostro, se debe emplear un limpiador dermocosmético adecuado al tipo de piel y se concluye empleando agua.

Si se utiliza una leche desmaquillante se debe usar un tónico para reequilibrar el pH de la piel, empapando el disco de algodón y aplicándolo por todo el rostro.

Luego se recomienda realizar la exfoliación del rostro con el uso de un producto que intensifique la acción purificante del desmaquillado, como ejemplo las mascarillas que resultan muy eficaces para una buena acción exfoliante.

Se debe iniciar en la frente hasta el contorno de la cara incluyendo la nariz, pómulos y barbilla, ya que con el cutis húmedo se debe aplicar el exfoliante en pequeñas cantidades.

Luego se restriega suavemente en forma circular generando una pequeña presión en las distintas áreas del rostro y realizar un baño de vapor que logre la apertura de los poros mejorando la limpieza.

Para este procedimiento se debe hervir agua y cuando se aprecien las burbujas se acerca el rostro un aproximado de 30 centímetros, mientras la cara se recubre con una toalla para que no se escape el vapor, originando que los poros se abran y mejore la circulación.

Se deja reposar la piel por diez minutos para limpiar manualmente los puntos negros o granos envolviendo los dedos con gasas, ya que estas se encuentran desinfectadas y no generan heridas innecesarias en el rostro.

Cuando la piel se encuentre libre de impurezas, granitos, espinillas y puntos negros se procede a aplicar una mascarilla que se adecue al tipo de piel, ya sea para piel grasa, pieles secas o mascarillas con resultados hidratantes o nutritivos.

Es de gran importancia cerrar los poros y nivelar el PH de la piel, por lo que se recomienda el uso de un tónico que aplicarse todo el rostro realizando un masaje suave.

El último paso es la hidratación la cual es indispensable para un cutis perfecto, se debe emplear una crema hidratante que favorezca la mejora de la elasticidad e hidratación de la piel previniendo quede con una sensación áspera y reseca.

¿Cada cuánto tiempo hay que hacerse una limpieza facial?

El tiempo depende de muchos factores, pero va a influir el estilo de vida y los hábitos, ya que, no es lo mismo encontrarse contantemente en un ambiente lleno de suciedad y polución que estar en un espacio natural sin contaminantes.

En ambos casos se necesita de una higiene, pero en el primer caso debe ser más constante, ya que la polución queda impregnada en la piel, se crea capa sobre capa y se endurecen logrando que las células no respiren con normalidad.

Por ello es recomendable realizar limpiezas con los cambios de estaciones si se encuentra en un ambiente limpio y si es todo lo contrario la mejor opción es realizarlas semanal o hasta diario de una manera bastante sencilla.

¿Cómo puedo saber si mi piel está sucia?

Es muy sencillo ya que para saber si necesita de una limpieza facial profunda solo debe fijarse si tiene una amplia concentración de puntos negros en la piel, así como la apariencia de granos con mas frecuencia.

Si el tono de piel es apagado es necesario de una limpieza de cutis para eliminar las toxinas, disminuir las terribles espinillas y el acné, logrando la mejora de la circulación de la cara para alcanzar la tersura y la elasticidad.

¿Debo realizarme una limpieza de cutis si no me maquillo?

Incluso si no se maquilla, es necesario la aplicación de la limpieza para erradicar los restos de la crema hidratante, el polvo y la contaminación de las calles que logran ensuciar y obstruir los poros.

Al realizar las limpiezas de la manera adecuada el rostro se encuentra lleno de luz, vida y de belleza natural, y si realiza una limpieza profesional se notará una diferencia mas amplia gracias al tratamiento facial.

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